La Guardia Civil explosionó ayer una bomba de 60 milímetros que apareció en aguas de Cabrera, en concreto en el islote de las Ratas.
La granada de mortero fue descubierta, al parecer, por unos biólogos, que informaron a la Benemérita del hallazgo. Ayer por la mañana un equipo de Geas (Grupo Especial de Actividades Subacuáticas) y de Gedex (Grupo Especial de Desactivación de Explosivos) se desplazaron hasta Cabrera en una embarcación.
Los submarinistas localizaron sin problemas la bomba, a pocos metros de profundidad, y procedieron a sacarla del agua, para que los expertos en explosivos la detonaran. La operación se llevó a cabo sin problemas y ahora la Guardia Civil está tratando de aclarar cuál es el origen de la granada de 60 milímetros.
En un primer momento se especuló con que fuera un proyectil de la Guerra Civil Española, pero las últimas gestiones apuntan a que la granada podría proceder de unas maniobras posteriores. Casi cada mes, los Gedex descubren o son alertados de algún proyectil abandonado en playas o zonas rocosas junto al mar.