Una pareja ha sido condenada a cuatro años de cárcel por maltratar y agredir al hijo de la mujer, de 2 años de edad, que convivía con ambos y fue ingresado en coma a raíz de las lesiones causadas por los condenados.
El juicio que debía comenzar hoy en el juzgado de lo penal 6 de Palma por las agresiones a este menor ha acabado con un acuerdo entre las acusaciones y la defensa, por el cual la madre del niño, Eva H., de 28 años, y su pareja, David V., de 31 años, tendrán que cumplir tres años y medio de cárcel por malos tratos y seis meses más por lesiones.
La pena para las lesiones, según han informado a Efe fuentes jurídicas, se ha aplicado con la agravante de parentesco, en el caso de la madre, y de reincidencia, en el caso del hombre.
El compañero sentimental de la mujer cuenta con tres antecedentes policiales por robo e incluso ella llegó a denunciarle en una ocasión por malos tratos, aunque al final retiró la denuncia.
Aparte de los cuatro años de cárcel, el juez ha decretado retirar a la mujer la patria potestad de su hijo y ha prohibido a ambos acercarse al niño en los próximos diez años, al tiempo que les ha condenado a pagar al menor unos 4.400 euros de indemnización por las lesiones causadas.
Los hechos ocurrieron el pasado 12 de febrero, cuando la pareja fue detenida por la policía en Palma en el centro de atención primaria de Son Gotleu de Palma, al que ambos acudieron para curar las heridas al niño.
En este centro sanitario, el pediatra se apercibió de que las lesiones no eran habituales y llamó a la policía.
El niño llegó inconsciente al centro con un cuadro de hipotermia y, una vez en el Hospital de Son Dureta, se le diagnosticó traumatismo cráneo encefálico, múltiples hematomas en su cara, herida inciso contusa en el párpado y pie derechos, hematomas en codos y abrasiones superficiales en el abdomen y glúteos.
Allí, el menor tuvo que pasar cinco días hospitalizado y requirió de un total de 28 días para su curación completa, si bien los golpes han dejado cicatrices en su cara.
Hasta el 12 de febrero se habían abierto cerca de 20 partes médicos al niño de 2 años, con lesiones como quemaduras en la cara y hematomas.
Según el escrito de acusación del fiscal, estos malos tratos se produjeron de forma reiterada durante aproximadamente un año, desde que el menor convivió con la pareja.
Cuando los condenados llevaban al niño a los centros sanitarios para que fuera atendido de las heridas que le causaban, indica la Fiscalía, ambos ocultaban su procedencia y argumentaban que se debían a caídas fortuitas.