Cerco a la prostitución en la bahía de Palma

Cerca de medio centenar de agentes de la Policía Local de Palma, Calvià y Cuerpo Nacional de Policía participaron en una nueva redada contra la prostitución, venta ambulante y trileros en la bahía de Palma. Concretamente las actuaciones policiales se centraron en la Platja de Palma, Santa Ponça y Magaluf.
La primera de las redadas se inició sobre las 23 horas en la Platja de Palma y se prolongó hasta las cuatro de la madrugada de ayer. Durante la misma, la Unidad Nocturna y el Grup d'Actuació Preventiva (GAP) de la Policía Local se encargaron de controlar la primera y segunda línea mientras que el Cuerpo Nacional de Policía hacía lo propio en tercera y cuarta línea. Como resultado del operativo conjunto se consiguió identificar a un total de 23 prostitutas, en su mayoría nigerianas, y se procedió a la detención de 13 de ellas. A las mujeres se les acusa de estar ilegalmente en el país y se les ha incoado un expediente de expulsión. Se trata de la segunda actuación de estas características realizadas en menos de una semana en la principal zona turística de Mallorca.
La Platja de Palma, sobre todo la zona de 'Las Maravillas', es un foco problemático de prostitución callejera y los hoteleros, comerciantes y vecinos llevaban tiempo pidiendo una intervención policial contundente. La prostitución conlleva hurtos, agresiones -en especial a turistas ebrios-, y robos con violencia, por lo que la nueva redada realizada ayer era una prioridad.
Llama la atención que durante el azote policial, las prostitutas trataron de escapar y se escondían entre los arbustos y debajo de los bancos del mobiliario urbano. También se sorprendió a un alemán cuando trataba de esconder un bote con pastillas.
Por otra parte, a las 03.30 horas y hasta las 05.30 horas, en Calvià, unos 15 agentes realizaron redadas en las playas de Punta Ballena, Santa Ponça y Magaluf. Durante las mismas se procedió a la identificación de numerosas prostitutas y se levantaron más de 30 actas de venta ambulante.
Robos silenciosos
Según fuentes policiales consultadas, las prostitutas de nacionalidad nigeriana no tienen proxeneta ni chulos. Trabajan en grupos de féminas, son de gran corpulencia y una de ellas -el cebo- se ofrece a turistas borrachos. A los pocos minutos las otras compañeras rodean a la víctima y le roban la cartera y objetos de valor. Àngel García, portavoz de prensa de la Policía Local afirma: «En Platja de Palma tenemos un alto número de delitos de que no son denunciados. Son los que denominamos robos silenciosos», concluye.