La Policía Judicial de la Guardia Civil sospecha que el incendio que carbonizó a una mujer en su casa de Sóller se inició en el brasero, y que no fue detectado por los vecinos debido a que se trató de una combustión lenta.
Tal y como adelantó ayer Ultima Hora, el cuerpo sin vida de Angelina L., una ciudadana alemana de unos 60 años de edad, fue localizado sobre las seis de la tarde, cuando unos vecinos se asomaron por una ventana y detectaron el cadáver en la sala.
Hacía aproximadamente un mes y medio que nadie veía a la vecina, que vivía sola, y los residentes en la calle Pau Noguera estaban preocupados. La correspondencia se seguía acumulando en la puerta de la casa y unos vecinos saltaron por la parte trasera de la vivienda y realizaron el macabro hallazgo.
La Guardia Civil se hizo cargo de la investigación y los agentes forzaron un acceso, para entrar en la casa rotulada con el número 41. En el interior se encontraron una gran cantidad de basura acumulada -lo que parece confirmar la hipótesis de que la señora padecía el Síndrome de Diógenes- y después hallaron el cráneo y los huesos carbonizados, junto a plásticos y papeles chamuscados.
Los funcionarios del cuartel se pusieron en contacto con la Policía Judicial de Calvià, que se desplazaron a Sóller para investigar in situ las circunstancias de la muerte de la vecina alemana.
El Juzgado de Instrucción número 7 de Palma, que ayer se encontraba en funciones de guardia, también fue puesto al corriente de lo ocurrido en Sóller y el juez dio las instrucciones pertinentes para que se levantara el cadáver y los restos se condujeran hasta el instituto anatómico forense, donde hoy se le ha practicado la autopsia.
Al parecer, el examen forense ha confirmado que la víctima falleció hace más de mes y medio y que se trató de un fallecimiento accidental, sin mano criminal.
Brasero
Las llamas, de acuerdo con los datos facilitados ayer desde la Oficina Periférica de Comunicación (OPC) de la Comandancia palmesana, parece ser que se iniciaron en un brasero de la sala y alcanzaron el cuerpo de la señora, que antes pudo quedar aturdida por el humo. Así se explicaría que no hubiera intentado huir de las llamas, que en cualquier caso no se propagaron más allá del entorno inmediato de la sexagenaria.
Ayer, la noticia de la muerte de la vecina de la calle Pau Noguera fue también muy comentada en Sóller. Sin embargo, la mayoría de los vecinos coincidieron en señalar que la fallecida no llevaba una vida social muy intensa y que pasaba mucho tiempo sola en su casa, por lo que no era demasiado conocida. Uno de los residentes explicó que Angelina L. tiene dos hijos en Alemania, que ya han sido avisados de la tragedia.
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