Agentes del GAP, (Grupo de Atención Preventiva) de la Policía Local de Palma, asestaron, durante la madrugada de ayer, un nuevo e importante golpe a la venta ambulante en las calles de Palma.
El grupo de élite policial inició la operación sobre las 00.50 horas y se prolongó hasta durante varias horas.
Debido a la proliferación de dununcias y quejas formuladas por parte de los comerciantes de la zona de La Lonja, plaza Drassanes y, en definitiva, el casco antiguo de Palma, la Policía Local habilitó un dispositivo especial para luchar contra la venta clandestina e ilegal por parte de ciudadanos de color.
Durante la operación, un total de doce agentes del GAP tomaron literalmente la zona, cerrando la misma a cal y canto. Tras realizar exhaustivos registros procedieron a la detención de dos personas. La primera de ellas acusad de un detito de atentado y resistencia a los agantes de la autoridad. La segunda, por estancia irregular en el país. Además, los policías incautaron una gran cantidad de material. Entre ellos, falsificaciones de las primeras marcas de cinturones, bolsos, carteras y prendas de ropa. También localizaron una importante cantidad de relojes falsos, peluches y gafas.
A todos los ciudadanos identificados que estaban vendiendo ilegalmente, pero que disponían de documentación en regla, se les levantó un acta y se remitió un informe judicial a las autoridades competentes.
Los vecinos y comerciantes aplauden una vez más la actuación policial y animan a Cort a que el Grupo de Atención Preventiva (GAP) realice nuevas actuaciones en la zona.
«Nosotros pagamos impuestos y no es normal que esta gente nos hunda el negocio», afirma un comerciante de la zona.
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