Un excursionista de 53 años de edad, y de nacionalidad alemana, falleció ayer a unos 1.100 metros de altura, en la ruta del Massanella, muy cerca de la cima de aquella montaña.
De acuerdo con los datos facilitados por los bomberos, la Guardia Civil y el 112, la víctima formaba parte de un grupo de 17 turistas alemanes, que se hospedaban en un hotel de Pollença y que ayer se desplazaron hasta el Massanella para intentar coronarlo. La excursión avanzaba a buen ritmo y por la tarde, cuando se encontraban en sa Font de s'Avenc, uno de ellos se encontró indispuesto.
Cayó
El excursionista se desplomó y sufrió una fuerte contusión en la cabeza. Entre sus compañeros se encontraba un médico, que fue la primera persona que lo atendió e inició las tareas de reanimación. Los servicios de emergencia fueron alertados y seis bomberos de los equipos de montaña de Inca y Sóller se adentraron en el Massanella, en busca del grupo.
De forma paralela, la Benemérita movilizó a su helicóptero para que sobrevolara la zona. El rescate fue laborioso porque los alemanes estaban a mucha altura, muy cerca de la cima. Cuando por fin los bomberos llegaron a su altura comprobaron que el turista herido en la cabeza ya había fallecido y que no se podía hacer nada por él.
Los bomberos cargaron el cuerpo sobre una camilla y acudieron a un paraje hasta el cual podía acercarse el helicóptero. Llegados a este punto, el aparato descendió hasta posarse ágilmente sobre unas rocas y los funcionarios introdujeron el cuerpo en el interior de la cabina.
De allí fue trasladado hasta el instituto anatómico forense, donde hoy está previsto que se le practique la autopsia. El resto de excursionistas quedó muy afectado por el dramático final de la ruta al Massanella.