La Guardia Civil de Inca ha detenido a un letrado suspendido por el Colegio de Abogado de Balears pero que seguía ejerciendo la profesión por un supuesto delito de estafa a una mujer a quien cobró 21.500 euros en concepto de gastos de representación.
Según informa hoy el Instituto Armado en un comunicado, el arresto del hombre, de 40 años y que responde al nombre de Jose María D. C., se produjo el pasado día 11 a raíz de la denuncia de una mujer que había contratado sus servicios como abogado.
La denunciante afirma que había contratado en 2007 al detenido y le había otorgado poderes para que la representara ante el Consell y otras instituciones, con el fin de que le resolviera una sanción por una infracción urbanística.
Para ello, le abonó un primer pago de 18.000 euros y, pasado un tiempo, el abogado suspendido le reclamó 3.500 euros más por gastos de representación.
Tras más de dos años sin que la afectada tuviera noticias del letrado, se trasladó en diversas ocasiones al despacho del detenido para informarse de la situación, donde siempre recibía la respuesta de que todo estaba arreglado, la reclamación seguía su tramite habitual de la administración y en breve se resolvería.
A raíz de la denuncia de la mujer, la Policía Judicial de la Guardia Civil de Inca abrió una investigación en la que se averiguó que el letrado había presentado ante el Consell un único recurso para la resolución de la infracción urbanística desde el 2007 hasta este año, por un montante de unos 24.000 euros.
Asimismo, y tras consultar con el Colegio de Abogados de Baleares, se comprobó que el detenido había sido sancionado en varias ocasiones por faltas graves y muy graves y que se encontraba suspendido del ejercicio de la abogacía hasta mañana, 17 de marzo, aunque seguía ejerciendo como letrado.