«Ha sido un milagro. Si el coche no queda enganchado por la pluma de la grúa el vehículo hubiera caído al terraplén, de más de doce metros, y el conductor posiblemente habría muerto». Éste era el relato estremecedor de uno de los integrantes de los servicios de emergencia que acudieron para auxiliar en un espectacular accidente registrado, a las 23.30 horas, del pasado viernes.
Al parecer, y según las primeras investigaciones realizadas por agentes de la Unidad de Atestados y Unidad Nocturna de la Policía Local de Palma, el conductor de un BMW, por causas que se desconocen, pero que están siendo investigadas, se despistó, colisionó contra una valla metálica de protección sita en sa Porta des Camp, donde antiguamente estaban ubicados los edificios militares, y quedó enganchado en un amasijo de metal de una grúa, evitando así la caída a un desnivel de más de doce metros.
Rápidamente acudieron los servicios de emergencia y, con ayuda de una grúa, consiguieron rescatar el coche en una laboriosa y complicada maniobra.
El conductor consiguió afortunadamente salir por la puerta trasera y salvar su vida.
Por otra parte, en la calle Joan Carles I, en Andratx, un conductor en estado de embriaguez perdió el control de su Mercedes sobre las 20.30 horas y se empotró contra un coche que se encontraba estacionado y el escaparate de la mercería Ca na Parrala.
Al llegar al lugar de los hechos los agentes de la Policía Local y hacerle la prueba de alcoholemia, el conductor dio positivo y fue detenido.
Sobre las 23.00 horas fue puesto en libertad y el próximo martes se celebrará el juicio.