Andratx y Calvià, los más castigados

El temporal de viento y lluvia que azotó durante toda la jornada de ayer la Isla de Mallorca lo hizo con especial dureza en los municipios de Ponent: Andratx y Calvià. Àrboles caídos, contenedores volcados, vallas publicitarias por los suelos, carreteras cortadas, flota pesquera amarrada, barcos destrozados contra las rocas y dos de ellos hundidos.
El incidente más grave se produjo sobre las 7.30 horas cuando una embarcación, de unos 20 metros de eslora y en la que iban tres tripulantes, impactó contra las rocas de s'Aluet, en el Port d'Andratx, y se hundió. Agentes de la Guardia Civil de Andratx y marineros del club de vela tuvieron que efectuar un laborioso rescate. Finalmente los tres marineros sufrieron un principio de hipotermia y precisaron ser hospitalizados.
Por otra parte, en el mismo Port d'Andratx, concretamente en el faro verde, conocido popularmente como el far petit, una lancha, de grandes dimensiones, en funciones de ferry de transporte de pasajeros, colisionó contra los amarres y la zona rocosa. Las fuertes ráfagas de viento y el oleaje fueron las causas. La embarcación sufrió daños importantes en su estructura y se abrió una vía de agua que provocó que entrase en el habitáculo una gran acumulación de agua que provocó un hundimiento parcial. La rápida actuación de los marineros de la zona consiguió detener momentáneamente la entrada de agua y con ayuda de unos flotadores hinchables consiguieron estabilizarlo.
La caída de árboles fue una constante durante todo el día. La carretera que une Andratx a s'Arracó tuvo que ser cortada durante varias horas para que los miembros de Protecció Civil pudiersen retirar los numerosos pinos centenarios que cayeron sobre la calzada. El torrente de Andratx se desbordó y en Sant Elm varios árboles cayeron sobre un párking de coches.
La carretera que une el municipio andritxol y Estellencs sufrió un desprendimiento a unos tres kilómetros de Andratx. Una gran roca cayó sobre el asfalto y provocó un enorme agujero en la calzada. Rápidamente la Guardia Civil se hizo cargo de la situación y se cortó el tráfico.
En Calvià, los equipos de emergencia luchaban contra las inclemencias del tiempo y retiraban de la calzada los restos de vallas publicitarias, contenedores y letreros de comercios. Al mismo tiempo, en la playa de Palmanova, exactamente en el Passeig Marítim, varios árboles de gran tamaño cayeron sobre varios vehículos. La bandera de España, sita en la rotonda de Palmanova, tuvo que ser retirada al romperse la parte superior del mástil.