«Ha sido una auténtica pesadilla. Un mal sueño del que, lamentable me ha ocasionado unos daños irreparables, tanto físicos como psíquicos». Estas son las palabras desconsoladas de una mujer, una joven, que acudió a un centro de estética con la finalidad de mejorar su imagen y acabó con quemaduras de primer y segundo grado en distintas partes del cuerpo.
Los hechos se remontan al pasado día 17 de agosto. Fue entonces cuando la chica decidió acudir a un centro de estética de Palma para que le practicasen una fotodepilación, utilizando la técnica del láser, en las axilas, ingles y piernas. Hasta aquí, todo perfecto. Le hicieron un presupuesto, algo más de 1.500 euros, y sin que la visitara la doctora del centro se iniciaron las sesiones.
Al parecer, y según consta en la denuncia formulada recientemente, la chica que habitualmente practicaba este tipo de fotodepilación estaba de baja. Fue entonces cuando el centro de estética decidió sustituirla por una operaria, con poca experiencia, que provocó accidentalmente lesiones muy graves al paciente.
Como consecuencia del tratamiento inadecuado, la chica sufrió quemaduras de primer y segundo grado en las piernas, quemaduras de primer grado en las axilas y en las ingles.
Cuando la paciente detectó estas anomalías acudió al centro para protestar. En ese momento, según la versión de los afectados, la doctora reconoció el error del centro y se preocupó del estado de la joven. La afectada ha tenido que ponerse en tratamiento médico y está siguiendo, en la actualidad, un tratamiento dermatológico para intentar recuperarse de sus graves lesiones.
Hasta la fecha, el establecimiento de estética no se ha pronunciado y ha dejado en manos de su gabinete jurídico el tema. Los afectados, tras pasar por diferentes pruebas en el médico forense, interpusieron una denuncia ante las autoridades competentes.
«El problema fue que antes de hacerme una fotodepilación, lo normal, es que te visite el médico. Ahora, tiempo después, nos hemos enterado que al ser morena de piel y que cuando me dieron las sesiones era el mes de agosto, mi cuerpo lo asimiló muy mal y se produjeron estas quemaduras. Si me hubiera visitado la doctora o, simplemente la chica hubiera tenido más experiencia posiblemente nada de esto hubiera pasado», afirma la afectada que prefiere mantener su anonimato.