Torturas, lesiones y maltrato. Éstas son las acusaciones que han recaído sobre un vecino de Inca detenido hace unos días y que supuestamente tenía a su hija atada con grilletes a la cama para que, por las tardes, no saliera de casa. La menor también denunció que le dejaba en el cuarto un cubo con agua y otro para sus necesidades.
El caso se descubrió cuando una vecina acudió al cuartel de la Guardia Civil de Inca y denunció que en el piso de al lado una adolescente estaba secuestrada, al parecer por su padre. Los agentes abrieron una investigación y procedieron a la detención de un varón de una cuarentena de años, padre de la menor. Los funcionarios tomaron declaración a la chica y descubrieron que, en efecto, por las tardes era encerrada en su cuarto y no podía salir bajo ningún concepto a la calle, por espacio de varias horas.
El progenitor adoptaba esas medidas extremas porque no se fiaba de su hija. Por las mañanas, en el colegio, no temía por lo que pudiera hacer, pero por las tardes se quedaba sola en casa y él no consentía en que se ausentara.
La declaración de la víctima fue muy esclarecedora y contó que le golpeaba en ocasiones con un cinturón de color negro y que utilizaba unos grilletes -que podría haber conseguido en su profesión- para atarla a la cama.
La Guardia Civil registró la vivienda de Inca y localizó tanto el cinturón como las esposas, que han sido intervenidas a modo de pruebas inculpatorias contra el acusado. Su identidad no ha trascendido, pero parece ser que no contaba hasta la fecha con antecedentes policiales.
El acusado fue puesto a disposición judicial este fin de semana, tras su paso por el cuartel de la Guardia Civil, y quedó en libertad con cargos tras ser interrogado por la autoridad judicial. El juez, sin embargo, adoptó medidas de protección para evitar que padre e hija volvieran a coincidir y ordenó el ingreso en un centro de menores de la joven. La investigación policial todavía no ha finalizado y se está a la espera de tomar declaraciones a algunos testigos, entre los que podrían encontrarse familiares del acusado.