Bernat Coll, ex presidente del club Sport Inca, prestó ayer declaración en un juzgado de la ciudad por la querella que se ha formulado en su contra, en la que se le acusa de los delitos de apropiación indebida y falsedad en documento mercantil.
La querella la presentó el sustituto de Coll en la presidencia del club, Bartolomé Pons. En síntesis, los motivos de la querella se inician en una auditoría que se hizo cuando Coll dirigía el club, y en la cual se destapaban presuntas irregularidades, algunas de ellas de tipo económico. En concreto, Pons dijo a este periódico que las explicaciones que le había dado Coll sobre el paradero de 50.000 euros «no nos han convencido». También, un grupo de socios denunció a Bernat Coll ante el Govern por entender, entre otras cosas, que había creado una lista ficticia de socios paraa segurarse su reelección, y que durante su gestión se llevó a cabo una doble contabilidad.
Con respecto a la querella, Bartolomé Pons la presentó hace meses en el juzgado de Instrucción 6 de Inca. Durante los meses de junio y julio la titular del juzgado citó a varios testigos para que prestaran declaración, y a Bernat Coll se le citó a las once de la mañana de ayer.
Poco antes de la hora citada Coll llegó al edificio de los juzgados acompañado de su abogado. Salió dos horas después y a preguntas de este periódico dijo que no quería hacer ninguna declaración.