La Guardia Civil ha tomado declaración a varios implicados y testigos de la pelea registrada en la madrugada del sábado en la calle Galeón de Magaluf, que acabó con cuatro detenidos y un turista inglés en estado crítico, ingresado en Son Llàtzer. El herido, identificado como Anthony Charnock, de 44 años, continuaba ayer muy grave en la UCI de este hospital. Los detenidos fueron conducidos a la Comandancia y esta tarde o mañana por la mañana pasarán a disposición judicial.
Tras las declaraciones de los implicados y los testigos se han podido esclarecer las causas de la pelea. El turista inglés está de vacaciones en Mallorca junto a un grupo de amigos y se aloja en el aparthotel Fiesta Jungla, ubicado en la calle Galeón de Magaluf. Habían llegado el día 24 y concluían sus vacaciones el próximo día 4.
La pelea se registró en el aparcamiento del bloque que hay justo enfrente del aparthotel. La víctima mantenía relaciones sexuales con una prostituta y los cuatro detenidos, que residen en la zona, empezaron a increparle y a lanzarle globos de agua y demás objetos. Los detenidos -tres españoles y un inglés, aunque residente en la zona-, actuaron de esta manera hartos de que se repitan este tipo de escenas entre turistas y prostitutas junto a la finca, que se encuentra en pleno bullicio de Magaluf.
Después, el herido y un amigo fueron a por los residentes que les habían increpado y se inició una discusión. La disputa fue subiendo de tono, hubo un intercambio de insultos y empujones y el amigo de la víctima dio un golpe en la cara a uno de los detenidos, causándole lesiones. Entonces, otro de los arrestados cogió un bate de béisbol y golpeó a la víctima, quien sufrió lesiones muy graves y fue evacuada a Son Llàtzer.
Los investigadores tomaron declaración a numerosas mujeres que ejercen la prostitución en Magaluf y a testigos. Posteriormente identificaron a los cuatro implicados en la agresión y los detuvieron. Los agentes recogieron diversas muestras en la finca donde ocurrió la pelea. La investigación se vio dificultada porque dos vecinas, una de ellas allegada a uno de los sospechosos, limpiaron la sangre del turista en el parking.