Asesinato después de De Santos. El Tribunal del Jurado enjuiciará el próximo mes de septiembre a los dos acusados por la muerte violenta del ciudadano británico Daniel Hastelow una semana después de decidir si el ex edil de Cort, Rodrigo de Santos, malversó dinero público en clubes del alterne gay.
El fiscal pide un total de 42 años de cárcel para los dos acusados por asesinato y allanamiento de morada. Según consta en el escrito de acusación, Richard Henry Roberts y su compañero Paul Anthny Griffiths planearon el asesinato como venganza a la agresión que el primero había sufrido por parte de la víctima, que le había llegado a amenazar de muerte. Los tres británicos habían mantenido discusiones desde hacía tiempo y los dos procesados estaban molestos por el carácter violento de la víctima.
El fallecido era un hombre de fuerte complexión por lo que, sus presuntos asesinos decidieron atacarle por sorpresa. El trece de enero de 2008, tras tomar unas cervezas, hundieron de madrugada la puerta de la vivienda de Hastelow. De acuerdo con la acusación iban armados con un bate de béisbol y un cuchillo de grandes dimensiones. Irrumpieron en la habitación en la que la víctima dormía tras una noche de alcohol, le golpearon y le clavaron hasta en ocho ocasiones el cuchillo, cuya hoja tenía cuatro centímetros de ancho y unos veinte de largo. Las puñaladas le alcanzaron varios órganos vitales, entre ellos el corazón y provocaron su muerte.
Los dos agresores fueron detenidos la misma noche de los hechos por la Guardia Civil de Palmanova. La parte más dura de la investigación fue la búsqueda del arma homicida. Hasta buzos intervinieron en los intentos de rastrear el cuchillo. Los agentes sí pudieron localizar una grabación de la cámara de vigilancia de los apartamentos en los que vivía la víctima en los que aparecían los dos agresores.
Cada uno de los dos acusados se enfrenta a una condena de 18 años por el delito de asesinato y de otros tres por otro de allanamiento de morada. Además, la acusación pública pide una indemnización para los padres del hombre fallecido de 90.000 euros.