V. MALAGÓN
Un soldado se enfrenta a una posible pena de 16 años de prisión y otros dos compañeros suyos a otra de doce por un delito de abusos sexuales a una compañera de cuartel. El caso quedó ayer visto para sentencia en la Audiencia Provincial de Palma. La Fiscalía mantuvo la petición de prisión para los tres, aunque realizó informe.
Según la acusación, los tres soldados forzaron a que su compañera les practicara una felación. Los hechos tuvieron lugar en junio de 2005 en una discoteca de s´Arenal. Los acusados niegan los hechos y afirman que tuvo lugar una relación consentida. En su declaración, la víctima aseguró que fue sujetada y que le bajaron los pantalones. Sin embargo aseguró no recordar muchos detalles y no pudo concretar por qué no denunció los hechos de forma inmediata. Sólo acudió a sus superiores cuando a su pareja, un cabo, le llegó el rumor de que le había sido infiel. Según un compañero que compareció como testigo tuvo lugar una fuerte discusión entre la pareja por la infidelidad y, entonces la joven habría respondido con la violación.
Varios testigos negaron que la mujer se comportara de forma anormal tras la noche de autos. Dos compañeros de la base ratificaron que dos días después de los hechos volvió a la misma discoteca y estuvo bailando con uno de los acusados. Las defensas de los tres acusados pidieron la libre absolución.