Alberto Juan Llaneras, un policía local de Palma de 38 años de edad, permanece ingresado en la UCI de Son Dureta después de que en la madrugada de ayer sufriera un aparatoso accidente de tráfico cuando patrullaba por la carretera de Sóller, frente a la antigua prisión.
El agente y Rafael, su compañero, patrullaban sobre la una y media de la madrugada por aquel tramo y Alberto no advirtió a tiempo un bordillo de reciente construcción. La zona, además, está deficientemente iluminada y cuando el policía intentó reaccionar ya era tarde. Salió despedido contra un semáforo, que arrancó, y después moto y ocupante se arrastraron muchos metros, entre trozos de carrocería y líquidos derramados del motor.
Cuando los servicios sanitarios atendieron in situ a Alberto, su estado era muy grave. Tenía una pierna destrozada, un pulmón afectado, presentaba un corte inciso en la frente y lesiones en clavícula, tórax, tibia y peroné. El comisario Nicolás Herrero, jefe de la Policía Local de Palma, fue avisado de la gravedad del accidente y se personó de madrugada en aquel punto kilométrico de Palma, para interesarse por lo ocurrido.
Una ambulancia trasladó al motorista municipal hasta el hospital de Son Dureta, donde quedó ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Ayer por la mañana, a las siete, los médicos lo operaron y la intervención se prolongó hasta las dos de la tarde. Los facultativos creen que su recuperación será muy lenta y calculan que podría estar dos años en reincorporarse a su puesto de trabajo.
Alberto Juan Llaneras, hijo de un conocido policía local de Palma, está considerado como un gran profesional y es muy querido y respetado en el Cuerpo.