La policía interceptó en el aeropuerto de Palma a un individuo que traía desde Brasil tres kilos de pasta de cocaína escondidos en el doble fondo de su maleta. Según se desprende de la investigación, el arrestado, Tomás M.G., de 39 años de edad, había sido contratado por algún grupo organizado de narcotraficantes para introducir la droga en España, lo que se conoce como 'correo' o 'mula'. No obstante, también quiso 'trapichear' por su propia cuenta para sacar el máximo provecho del viaje y trajo 35 gramos de cocaína en el estómago. Por este motivo, después de ser detenido fue trasladado a Son Dureta, donde quedó hospitalizado a la espera de que expulsara los envoltorios con droga que portaba en el interior de su organismo.
El detenido reside en la Costa del Sol y viajó el pasado 6 de febrero desde Málaga hacia Brasil. El lunes regresó a España desde Sao Paulo, aunque decidió entrar en la Península pasando antes por Son Sant Joan, vía Zurich, al considerar que se trataba de una vía más 'segura'. Sin embargo sus planes se fueron al traste, ya que fue descubierto en el aeropuerto palmesano por los agentes del Cuerpo Nacional de Policía (CNP).
Los tres kilos de pasta de cocaína estaban perfectamente ocultos en un disimulado doble fondo en los laterales de su maleta, que había sido preparada para este transporte.
Antes de haber sido puesta en el mercado, la pasta de cocaína debería pasar por un laboratorio clandestino y ser sometida a un sencillo proceso químico. Los tres kilos de pasta de cocaína, una vez adulterados para su consumo, se podrían haber triplicado, aportando un beneficio económico a los narcotraficantes superior a los 600.000 euros. El detenido habría acordado el pago de una determinada cantidad con los narcotraficantes por traer la droga. Asimismo, portaba cinco envoltorios con un total de 35 gramos de cocaína en su estómago para hacer más rentable el viaje, ya que el dinero de la venta de esta droga sería en beneficio propio.
El detenido será puesto a disposición judicial en las próximas horas.