La Policía Judicial de la Guardia Civil ha abierto una investigación para aclarar el intento de secuestro que sufrieron el viernes dos adolescentes que caminaban por una calle de sa Pobla. Las diligencias se están llevando a cabo con la máxima discreción, aunque ha trascendido que de momento no se han llevado a cabo detenciones.
La denuncia la interpuso el padre de una de las dos víctimas, que mallorquinas y vecinas de sa Pobla. De acuerdo con el relato de las menores, poco después del mediodía caminaban las dos por una calle de aquella localidad y un vehículo de la marca Mercedes, de color gris y con bastantes años de antigüedad, se detuvo bruscamente junto a ellas.
Del turismo se apearon dos individuos, que las amenazaron y las metieron por la fuerza en el asiento trasero. En aquel momento la calle estaba desierta, pero de repente pasó un coche que se cruzó con el Mercedes y le obligó a detenerse, para no colisionar. Las chicas aprovecharon el frenazo para abrir una de las puertas y escapar, aunque los desconocidos también salieron tras ellas, corriendo. A los pocos segundos los magrebíes se detuvieron y regresaron al coche, que arrancaron rápidamente y se marcharon del lugar. Todo parece indicar que temían ser vistos por algún testigo, ya que unos vecinos salieron a la calle en dirección al Mercedes.
Las dos adolescentes, de 14 años de edad, tras recuperarse del susto acudieron a la casa de una de ellas y contaron lo sucedido a la familia. Luego uno de los padres se desplazó al cuartel de la Guardia Civil e interpuso una denuncia por intento de secuestro. Los agentes traspasaron el caso a la Policía Judicial y las dos menores prestaron declaración sobre el traumático episodio.
Según contaron, los dos sospechosos eran de aspecto magrebí, de altura media baja -cerca de 1,70- y de piel bastante morena. Tendrían una treintena de años, aunque no pudieron precisar más porque los hechos ocurrieron en cuestión de segundos y ellas seguían muy angustiadas por lo ocurrido.
Los investigadores realizaron ímprobas gestiones en la localidad y contactaron con algunos vecinos de la zona, para saber si alguno de ellos había presenciado parcial o completamente la secuencia del intento de secuestro.
Al parecer, los dos sospechosos se dirigieron a las adolescentes en un correcto castellano, lo que hace pensar que llevaban tiempo en la isla o residiendo en España. Las características del Mercedes son bastante comunes, por lo que la búsqueda podría ser compleja.
De la declaración de las dos afectadas se deduce que no conocían de nada a los individuos que las abordaron, ni tampoco los tenían vistos de por sa Pobla.
Por otra parte, el Cuerpo Nacional de Policía sigue investigando la denuncia presentada por unos padres palmesanos por el intento de secuestro de su hija de cuatro años a la salida del colegio Joan Capó, en la barriada de Son Gotleu. Una mujer de etnia gitana evitó, en aquella ocasión, que una desconocida se llevara a la menor.
También esta semana en una gran superficie comercial una mujer rumana también se acercó a un bebé con intenciones dudosa, aunque fue descubierta y se marchó apresuradamente.