Eran las ocho y media de la mañana cuando saltaron las primeras voces de alarma.
Los servicios sanitarios del 061 requerían la presencia de los Bombers de Palma para rescatar a los integrantes de una familia que se encontraban afectados por la inhalación de monóxido de carbono en el interior del número 4 de la calle Comandante Sureda Hernández, de Palma.
Al parecer, y según las primeras investigaciones realizadas por los especialistas desplazados hasta el lugar de los hechos, una mala combustión en un calentador provocó un pequeño incendio y fuga de CO2.
A la llegada de los bomberos se realizó la ventilación del inmueble y fueron localizados restos de monóxido en las tuberías.
A raíz de la fuga tres personas resultaron heridas de distinta consideración; un hombre de 46 años de edad, una mujer de 45 y un joven de tan solo 16 años.
Los heridos fueron atendidos 'in situ' por los facultativos del 061 y trasladados con carácter de urgencia por varias ambulancias medicalizadas hasta el hospital de Son Dureta.
A media tarde de ayer, los pacientes fueron conducidos a otro centro hospitalario para ser introducidos en una cámara hiperbárica.
Al cierre de esta edición y, según información médica facilitada de las tres personas afectadas, ninguna de ellas su vida no corría peligro.
Por otra parte, los Bombers de Palma también tuvieron que realizar varias salidas en referencia a pequeñas caídas de ramas, tejas, paneles publicitarios y derrumbes de escasa significación.
El servicio más destacado se produjo en la calle Olmos, en el centro de Palma, donde una persona tuvo que ser desalojada de su vivienda al desplomarse parte de una terraza.
Los servicios de emergencia apuntalaron parte del suelo, pero por seguridad se prohibió el acceso al edificio. A primera hora de hoy está previsto que técnicos especializados se desplacen hasta el inmueble para realizar una exhaustiva revisión de la estructura.