A las ocho de la mañana de ayer, un grupo de operarios de la obra de ampliación del Port de Cala Rajada que se disponían a iniciar su jornada laboral localizaron el cuerpo de un hombre flotando en el agua.
Al parecer, y según las primeras hipótesis de la investigación realizada por la Policía Judicial de la Guardia Civil, el destacamento de la Benemérita de Capdepera y la Policía Local, los trabajadores avistaron un cuerpo boca abajo en la zona donde se habían colocado unos bloques de cemento de la ampliación del puerto.
Rápidamente los trabajadores dieron la primera voz de alarma y se desplazaron hasta el lugar de los hechos agentes de la Guardia Civil y Policía Local, además de varias ambulancias.
Tras rescatar el cuerpo, aproximadamente sobre las 10:30 horas, el titular del juzgado de Instrucción Número 3 de Manacor que se encontraba realizando funciones de guardia ordenó el levantamiento del cadáver.
El fallecido es un varón de nacionalidad marroquí que responde al nombre de Hamid Lakhuizi, cuya edad aún no había podido ser determinada.
El cuerpo sin vida del fallecido fue trasladado de urgencia hasta las instalaciones del Instituto Anatómico Forense de Palma con la finalidad de que en las próximas horas se realice la correspondiente autopsia y los médicos determinen la causa oficial de la muerte.
Según algunos vecinos de la zona consultados por Ultima Hora el fallecido podría ser un joven marinero marroquí que trabajaba en una embarcación. «El marinero debía estar realizando trabajos de limpieza del barco y se debió de caer», concluye un marinero de la zona. Los investigadores del caso en las próximas horas intentarán esclarecer los motivos por los que el varón falleció. El resultado de la autopsia será determinante para la resolución del caso. La noticia ha causado una gran expectación en Cala Rajada.