El Palau de Justicia se prepara para el juicio por el 'caso Son Banya' que comienza el lunes. La expectación generada por el caso, el gran número de acusados (27), de testigos y la previsión de que acudan numerosos familiares de los imputados, como suele ocurrir cuando se juzga a personas de etnia gitana, han hecho que se adopten medidas de seguridad especiales.
La limitación de espacio también impone restricciones. El juicio se celebrará en la sala 1 de la Audiencia, la misma en la que se juzgaron el 'caso Caballistas' o alguna de las piezas del 'caso Andratx'. A la sala sólo podrán entrar dieciséis personas como público que ocuparán cuatro bancos. Estos sitios se llenarán por orden de llegada. Otros tres bancos quedaran reservados para los medios de comunicación y los 27 encausados llenarán el resto de espacio, un total de seis bancadas.
En la calle
Por motivos de seguridad nadie que no vaya a entrar en la sala donde se desarrolle el juicio podrá acceder al interior del Palau de Justicia y tendrá que esperar en la plaça del Mercat. Ni siquiera se permitirá entrar en el claustro del edificio. Además se prevé un despliegue especial de Policía Nacional para controlar el desarrollo del juicio. Ayer por la mañana, responsables de la Unidad de Prevención y Reacción estuvieron en la Audiencia Provincial para concretar el dispositivo que se encargará de que el juicio transcurra con tranquilidad.
Las limitaciones de espacio hicieron que se barajase la posibilidad de celebrar el juicio en la UIB, aunque finalmente se desechó esta opción por seguridad.
En alto número de acusados lleva aparejado también la personación de hasta trece abogados defensores y varias acusaciones particulares. Por ello ha sido necesario también realizar pequeñas modificaciones en la sala donde se desarrollará el juicio. Al frente de la vista está el magistrado Eduardo Calderón, de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial. Como ponente actuará Diego Gómez Reino y el tercer juez será Juan Pedro Yllanes.
Las sesiones comenzarán el lunes a las diez de la mañana y está previsto que durante toda la semana que viene se repitan de diez a catorce horas. El juicio se reanudará el 26 de enero. En esta segunda semana la vista incorporará también sesiones de tarde. La previsión es que el lunes tan sólo de tiempo a dilucidar las cuestiones previas que planteen las partes sobre el funcionamiento del juicio o sobre la inclusión de nuevas pruebas y testimonios. El resto de la semana se sucederán las declaraciones de todos los acusados. La primera en responder a las preguntas del fiscal y de los letrados personados será 'La Paca'. En la segunda semana se sucederán los testigos y las pruebas periciales y quedará visto para sentencia.