Porto Cristo se echó ayer a la calle para encontrar a Manuel Pérez Fernández, el vecino desaparecido desde el pasado 1 de octubre. Manolo, como era conocido por todos, estaba enfermo de Diabetes y desde entonces ni ha acudido a ningún punto de salud ni tampoco ha tocado sus cuentas bancarias.
Entre las ocho y las nueve de la mañana de ayer, en el campo de fútbol de Porto Cristo, se estableció el punto de encuentro de las personas que querían participar en la gran batida. Uno a uno, fueron llegando hasta más de cien vecinos, a los que se sumaron voluntarios de Protección Civil, la Unidad Territorial de Costas (UTC) de la Policía Local de Porto Cristo, el Cuerpo Nacional de Policía, un helicóptero de Emergencias y perros adiestrados.
Los responsables policiales, entre los que se encontraba Àngel Duró, jefe de la UTC, desplegaron las patrullas por el perímetro a peinar y durante varias horas los grupos buscaron a Manolo por caminos, casas abandonadas, fincas, márgenes de la carretera y acantilados.
Manuel Pérez mide 1'90 centímetros de estatura, es pelirrojo y tiene la piel blanca. Trabajaba como camarero en algunos bares, de forma eventual y cuando desapareció estaba viviendo en casa de un amigo. Los investigadores no creen que se haya marchado de forma voluntaria porque en todo este tiempo no ha tocado sus cuentas bancarias. Familiares del desaparecido participaron en la gran batida de ayer, que finalizó sin noticias del vecino de Porto Cristo. En breve es posible que se monte otro operativo similar para buscar a Manolo.