Sin tregua. Un mes después de que la Guardia Civil interviniera cuatro kilos de heroína Palma, los mismos agentes antidroga se han incautado de seis kilos más de esa misma sustancia. Se trata de uno de los golpes más sonados contra el tráfico de drogas 'duras' y ayer tarde la operación continuaba abierta.
Los detalles del operativo no han trascendido, ya que no está finalizado, pero ayer este periódico pudo saber que de momento son dos los detenidos. A uno de ellos, considerado el 'correo' de la organización, se le intervino la mayor cantidad de la droga y el otro, supuestamente, está directamente relacionado con el alijo.
La droga, al parecer, se desembarcó en el puerto de Palma y al poco tiempo cayó en manos de los agentes del EDOA (Equipo contra la Delincuencia Organizada y Antidroga). Los dos sospechosos, cuyas identidades no han trascendido, se encontraban ayer en las dependencias de la comandancia palmesana, a la espera de ser interrogados.
Hace sólo un mes la Benemérita ya cazó otros cuatro kilos de heroína en la capital balear. En aquella ocasión fueron detenidos cuatro presuntos narcotraficantes, tres españoles y uno colombiano. Se trataba de Cándido F.N., de 27 años; José O.S., de 30; Antonio O.C., de 33 e Iván R.C., de 46. Éste último había sido policía en su país.
La intervención fue consecuencia de la 'operación Kabul', la toma del poblado del Son Banya y la posterior caída del clan de «'La Paca'. Durante los meses que duró la investigación se pincharon infinidad de teléfonos y de aquellas escuchas se descubrieron otras organizaciones.
Ahora, con los seis kilos de heroína intervenidos ayer en Palma, parece que ha ocurrido lo mismo que con el alijo de agosto . La sombra de Son Banya, pues, es alargada. Todo parece indicar que en las próximas horas se llevarán a cabo nuevas detenciones relacionadas con el alijo palmesano, ya que los investigadores tienen claro que además de los dos detenidos hay más implicados. El precio de los seis kilos de heroína en el mercado negro habría alcanzado cifras muy elevadas. Desde el año pasado la tendencia indicaba que el consumo de esta droga estaba descendiendo, en favor por ejemplo de la cocaína, el «cristal» o las pastillas de diseño. Con los dos últimos alijos de agosto y septiembre parece que la tendencia se ha vuelto a invertir.