JOAN SITGES
El cuerpo sin vida de una persona fue avistado ayer por bañistas en Cala Mondragó. El hallazgo se efectuó a primera hora de la tarde y de inmediato se dio aviso a los equipos de emergencia y Protección Civil. Unas personas se acercaron al cuerpo y se comprobó que se trataba de un hombre de mediana edad. Momentos después llegaron policías locales y agentes de la Guardia Civil de Santanyí, así como una ambulancia. Pero por desgracia los médicos no pudieron hacer más que certificar la muerte. La Guardia Civil efectuó gestiones, y en poco tiempo se conoció la identidad de la persona fallecida. Se trata de Matías Detjen, un turista alemán que se alojaba en un hotel de la zona. El hombre, como hacía casi cada día, salía a media mañana a darse un baño. El cuerpo no presentaba ningún signo de violencia y, a primera vista, la muerte le pudo sobrevenir a causa de un infarto. Aunque será la autopsia la que determine este dato de forma oficial.
A las cuatro de la tarde un juez de Manacor ordenó el levantamiento del cadáver, que fue trasladado al Instituto Forense para la autopsia.