A media mañana del día de ayer fueron quemados en la incineradora de Son Reus, en Palma, más de 4.700 kilogramos de hachís, de los que tres toneladas corresponden a una sola incautación realizada en la localidad de Valldemossa hace un mes, mientras que el resto es fruto de hasta un total de cinco intervenciones policiales diferentes, realizadas en la Isla en lo que va de año por los diferentes Cuerpos de Seguridad del Estado.
El delegado del Gobierno, Ramón Socias, destacó que 3.069 kilos del total quemado en la jornada de ayer corresponden a la intervención realizada conjuntamente por la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía el pasado 25 de abril.
Ramón Socias consideró que aquella actuación queda culminada con la destrucción de la droga. Por otra parte Socias añadió: «La efectividad en impedir que Balears sea un punto de entrada y distribución de droga, tanto para el país como para el resto de Europa es una de nuestras tareas», concluyó el delegado del Gobierno.
Respecto al resto del hachís quemado ayer, que suma casi 1'7 toneladas, casi en su totalidad corresponde a una intervención realizada en la zona de Cala d'Or, que a su vez es continuación de otra realizada también allí con anterioridad, con 1.500 kilos de droga intervenidos, mientras que los restantes 155 kilos corresponden a cuatro operaciones más pequeñas.