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Acusan de seis abusos a menores a un ex presidente vecinal de Pere Garau

Dictado el auto de procesamiento el caso deberá resolverse ante un tribunal

AGUSTÍN AGUILÓ
El ex presidente de la asociación de vecinos de la Plaza Pere Garau de Palma, en prisión provisional por ser sospechoso de los abusos sexuales a varias menores de edad, fue excarcelado ayer durante unas horas para que declarara ante la juez encargada de instruir el caso.

El sospechoso mantuvo una vez más que es «inocente» de los hechos por los que ha sido denunciado.
Su abogado, el letrado Jaime Campaner, presentó a la juez un informe realizado por una psicóloga de reconocido prestigio que ha examinado durante varios meses a las menores. La especialista, en su estudio, considera que las niñas no presentan síntomas de haber sido abusadas.

Tal informe contradice, pues, al realizado por los psicólogos forenses del Juzgado de Vía Alemania. El letrado defensor ha criticado que para la realización de su estudio dichos psicólogos «únicamente las examinaran durante unas horas».

Posteriormente la magistrada dictó auto de procesamiento en el que se da por finalizada la instrucción del caso, y se acusa al ex presidente de haber abusado sexualmente de seis menores.

Inicialmente se le acusaba de ocho abusos, pero la jueza ha decidido retirar dos causas por considerar que habían prescrito.
Con este auto de procesamiento, ha finalizado la fase de instrucción y el caso irá, por tanto, a juicio. El acusado, de 63 años, acudió al juzgado de Vía Alemania con semblante preocupado y esposado por agentes del Cuerpo Nacional de Policía.

Una vez declaró ante el juez, fue devuelto a la penitenciaría de Palma donde reside desde que el pasado mes de septiembre se le decretara prisión provisional hasta que se celebre el juicio.

Su abogado defensor ha solicitado también que, durante este tiempo, su representado pueda estar en libertad mientras no se pruebe su culpabilidad.
Los hechos que le imputan al ex presidente vecinal se remontan al año 1997 cuando la pareja del acusado regentaba un club social en la zona palmesana de Pere Garau donde se impartían distintos cursos y talleres para menores de edades comprendidas entre los 10 y 13 años.

De entre las menores, se encuentran las jóvenes denunciantes. Muchas ya han adquirido la mayoría de edad.
Según ellas el acusado se ganaba su confianza y se presentaba como una figura paternal, para después realizarle tocamientos y otros abusos de índole sexual.

La detención del hombre causó una enorme expectación en el barrio, que quedó dividido en defensores y detractores de su ex presidente, llegando a existir denuncias cruzadas por injurias y calumnias.

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