"Buenas noches señora, estamos realizando un control de alcoholemia, ¿ha bebido usted?
"He tomado un 'shandy'.
"Tendrá que efectuar la prueba de alcoholemia y facilitarnos su documentación.
"Bien
"Ha dado usted positivo, una tasa de 0'31 y tendremos que cursar la correspondiente sanción administrativa.
Ésta es una de las situaciones que se registró durante un control efectuado por la Policía Local de Calvià en la rotonda de Cala Fornells, en Peguera, entre las 22.30 horas y las 02.30 horas de la noche del sábado a ayer, domingo.
Una decena de agentes participaron en el dispositivo de control de alcoholemia y velocidad. Durante las cuatro horas que duró, los policías pararon a medio centenar de vehículos. Al final se interpusieron 17 denuncias por exceso de velocidad y cinco de los conductores que efectuaron la prueba de alcoholemia dieron positivo: Tres hombres, entre los que figuraba un conductor novel, y dos mujeres, a quienes se interpuso la correspondiente sanción administrativa ya que ninguno superó la tasa de 0'60 mg/l de alcohol en aire espirado, tipificado como delito tras la reciente reforma del Código Penal en materia de seguridad del tráfico.
No obstante, la Ley de Seguridad Vial tipifica como muy grave la conducción de vehículos habiendo ingerido bebidas alcohólicas con tasas superiores a las establecidas, o bajo los efectos de las drogas. Para estas infracciones muy graves, la Ley prevé la sanción de multa de 300 a 600 euros, imponiendo además, en todo caso, la suspensión del permiso de conducir por un periodo de hasta tres meses.
En cuanto a la pérdida de puntos, conducir con una tasa de alcohol superior a 0'25 mg/l en aire espirado y hasta 0'50, supone la pérdida de cuatro puntos.
En este margen estuvieron los cinco conductores que dieron positivo en el control de la Policía Local de Calvià efectuado en Peguera. Una vez finalizado, uno de los agentes que participaron en el mismo indicó que «en el anterior control hubo más conductores que dieron positivo y se pusieron menos multas de radar, y ahora ha ocurrido lo contrario, ha habido menos conductores que han dado positivo y hemos tenido que parar a más coches que circulaban a más velocidad de la permitida». También comentó: «A los conductores que sancionamos no les debe hacer gracia, pero estos controles son necesarios».