VASIL VASILEV
La policía está investigando los daños intencionados en siete coches que pertenecen al convento de las Hermanas de la Caridad, en Son Roca.
El convento está ubicado justo enfrente de la iglesia y entre ambos existe un aparcamiento donde las religiosas aparcan sus vehículos. En la noche del jueves uno o varios desconocidos accedieron al párking y fueron rompiendo los cristales de siete turismos, la mayoría de la marca Renault Clío. Se da la circunstancia de que había otros coches ajenos al convento, y los vándalos no los tocaron. El importe de los daños intencionados es muy elevado, ya que algunos coches eran nuevos.
De momento se ignora quién fue el responsable de los actos vandálicos pero los investigadores tienen claro que el atentado iba dirigido contra las monjas. En las últimas semanas el clima social se ha enrarecido en Son Roca porque algunos vecinos estaban radicalmente en contra de que se instalara un centro para personas «sin techo», precisamente muy cerca del convento. Las religiosas, en cambio, estaban a favor de esta iniciativa municipal, que al final no se llevó a cabo. La policía está investigando algunos comentarios de residentes, que amenazaron de forma más o menos directa a las monjas si seguían apoyando el proyecto de Cort.
De los siete coches asaltados en el aparcamiento parece ser que no faltaba nada del interior, lo que da a entender que el objetivo no era el robo, sino dañar los automóviles. Los investigadores han buscado huellas y han hablado con algunos vecinos por si habían visto u oído algo extraño la noche de los acontecimientos.