Policía y Guardia Civil han interceptado en apenas cuatro días a 30 conductores ebrios circulando por las carreteras de Balears.
Por parte de la Guardia Civil del subsector de Tráfico, durante el pasado fin de semana, se detectaron un total de 21 alcoholemias positivas en los distintos controles efectuados. De ellas, 13 se registraron en Mallorca, cinco en Eivissa y tres en Menorca.
Por parte de la Policía Local de Palma han sido interceptadas seis personas que conducían bajo la influencia de bebidas alcohólicas. En la madrugada del viernes se registraron cuatro de estas alcoholemias y también se procedió al arresto de un conductor que se negó a efectuar la prueba de etilometría, a pesar de que no estuvo implicado en ningún accidente ni protagonizó ningún incidente al volante.
Sobre las 23.35 horas del domingo fue detenido otro conductor bebido, el cual arrojó una tasa positiva de 0'71.
Este hombre, de 52 años de edad, circulaba con su coche por la calle Caro. Al llegar al cruce con la calle Soler se saltó el ceda el paso y justo en ese momento pasaba un vehículo policial. Los agentes pidieron la documentación al conductor y vieron que presentaba síntomas de haber bebido. Al realizarle la prueba de alcoholemia se confirmaron las sospechas, por lo que procedieron al arresto del hombre y se inmovilizó su vehículo.
Otro caso se dio en s'Arenal de Llucmajor, el domingo por la tarde, a las 19.30 horas, cuando se registró un accidente en la Plaça Major, en el que se vieron implicados dos vehículos. En el siniestro no hubo heridos pero los conductores no se ponían de acuerdo. Por ello se requirió la presencia de la Policía Local de Llucmajor. Al llegar, los agentes vieron que uno de los dos conductores, de 59 años, iba bebido. Este varón dio una tasa de 0'89 y fue detenido. Ayer fue entregado a la Guardia Civil.