El tramo final de la calle Manacor de Palma, a la altura de la rotonda de Can Blau, quedó ayer cerrado provisionalmente a consecuencia de un brutal accidente entre tres coches. Milagrosamente, sólo una mujer tuvo que ser hospitalizada.
El siniestro aconteció poco antes de las tres de la tarde, cuando la conductora de un Ford Fiesta salió de la rotonda a gran velocidad y se dirigió a la calle Manacor. Un BMW ocupado por una pareja se asomó desde la calle Sureda, para incorporarse a esa misma vía, y fue entonces cuando se produjo el primer impacto. El coche de gran cilindrada apenas resultó dañado, pero la conductora del Ford perdió el control y durante 50 metros fue dando vueltas sobre la calzada, hasta que finalmente se estrelló contra un Volvo que no pudo evitarla. El airbag de éste último saltó y su piloto, un varón de unos 40 años, sólo sufrió una contusión en la nariz.
La señora, en cambio, quedó atrapada entre los hierros de su automóvil. La parte del copiloto era la que presentaba el peor impacto y si hubiera estado ocupada posiblemente estaríamos hablando de un accidente con víctimas mortales. Tres dotaciones de bomberos auxiliaron a la mujer, que estaba consciente, mientras el Cuerpo Nacional de Policía y la Policía Local se desplegaban en aquel tramo para regular el tráfico. La víctima fue evacuada hasta la clínica Rotger, con pronóstico reservado.