La Guardia Civil, la Policía Local, la comisión judicial y el forense están volcados en la resolución del caso del joven que apareció muerto en extrañas circunstancias en Capdepera, en la tarde noche del miércoles. La principal hipótesis es que Manuel Trejo Pomar, de 24 años, fue atropellado antes de caer por un barranco. Ahora se investiga si cayó porque estaba conmocionado por la embestida o si alguien lo arrojó desde aquella altura.
La noticia adelantada ayer en exclusiva por Ultima Hora fue ampliamente comentada en Capdepera, donde la víctima era muy conocida. Trejo trabajaba como fontanero y albañil y esa mañana desapareció. Sus amigos, alarmados, lo buscaron por todo y su familia también comenzó su búsqueda. A las ocho de la tarde un grupo de amigos se desplazó al radiofaro de Aena, a las afueras de Capdepera.
Al subir una rampa empinada detectaron manchas de sangre, junto a las gafas graduadas y una bufanda de Manuel. Más arriba estaba su Land Rover de color Beige, con su documentación dentro, y a unos 20 metros, abajo de un barranco, apareció su cadáver despeñado.