Controles, rastreos y nuevas detenciones. La Guardia Civil y la Policía Local de Andratx realizaron ayer numerosas actuaciones en relación con el alijo de 4.500 kilos de hachís intervenido el sábado por la mañana en la costa de Sant Telm, en la zona de s'Algar, junto a los molinos.
A media mañana se tuvo constancia de la presencia de tres sospechosos, que estaban tomando café en un bar de Sant Telm, en la zona peatonal. Los agentes se desplazaron al lugar y montaron un dispositivo, tomando las medidas de precaución necesarias. Así las cosas, al poco rato entraron en el establecimiento y allí encontraron a dos de los sospechosos. Estos jóvenes se habían introducido en el baño del local con la intención de escapar por alguna ventana, pero fueron reducidos por los agentes y detenidos. En ese momento, también fue aprisionado en el exterior del establecimiento otro varón de mayor edad.
Los agentes comenzaron a realizar gestiones para identificar a los detenidos, que habían pasado la noche al raso en un pinar, a unos 300 metros de la iglesia de Sant Telm. Los policías inspeccionaron esta zona para ver si había alguien más escondido allí, y encontraron diversa ropa que los sospechosos se habían ido quitando mientras escapaban el día anterior.
El varón de mayor edad fue identificado como Gregorio M., un ciudadano cubano, de 39 años, que tiene domicilio en Valencia. Los otros dos arrestados son menores de nacionalidad marroquí, de 17 y 16 años. Estos dos jóvenes indicaron que Gregorio M. era el patrón de la planeadora interceptada. No obstante, los investigadores continúan realizando gestiones para aclarar los hechos. Posteriormente, los tres detenidos fueron trasladados al cuartel de la Guardia Civil de Andratx.
Con los de ayer ya son seis los detenidos en la operación, en la que, al parecer, había ocho implicados. El sábado, a primera hora de la mañana, cuando fue descubierta la embarcación en la costa de Sant Telm, se arrestó a tres individuos de nacionalidad marroquí, después de una persecución durante la que los agentes realizaron disparos al aire. La intervención truncó la tranquilidad de los pocos vecinos que hay por esta época en Sant Telm, que ayer no paraban de hablar sobre el tema.