El conductor ebrio que provocó el doble accidente mortal de la autopista de Inca eludió ayer la cárcel después de declarar una hora ante la jueza Catalina Martorell. La fiscalía había pedido prisión para José Àngel D.T., de 43 años, pero la magistrada estimó que bastaba con retirarle el carnet y obligarle a comparecer cada mes en el juzgado.
La Guardia Civil, tal y como adelantó ayer Ultima Hora, sometió al conductor a la prueba de alcoholemia tras la colisión, que dio un resultado de 0.8, es decir, cuatriplicó la tasa máxima permitida por la Ley. El imputado quedó en libertad con cargos y se le informó de que hoy por la mañana debía comparecer en el juzgado de Instrucción número 6 de Inca, que estaba en funciones de guardia. Miguel Àngel, que el día del accidente pilotaba un potente Mercedes ML 230, compareció acompañado de su abogado y de su esposa. Declaró durante una hora y el fiscal, tras escuchar su relato, le comunicó a la jueza que solicitaba el ingreso en prisión del acusado. Catalina Martorell, sin embargo, rechazó esta posibilidad y tampoco fijó una fianza. Adoptó otro tipo de medidas, como que el conductor se presente una vez al mes en los juzgados y le retiró el carnet de conducir. El hombre está imputado por un delito contra la seguridad del tráfico, otro de homicidio imprudente y un tercero de lesiones imprudentes.
Las familias de Ana María Baque Castro, de 36 años, y Vanesa Pérez Pérez, de 27, las dos mujeres muertas en el accidente que provocó el conductor borracho, también acudieron ayer a los juzgados de Inca, aunque por muy distinto motivo del de Miguel Àngel. Querían interesarse por la investigación y conocer los detalles de lo ocurrido. Cuando llegaron todavía no sabían que la jueza había dejado en libertad sin fianza al conductor acusado.