JAVIER JIMÉNEZ
La Guardia Civil está buscando a un taxista que supuestamente abusó en la madrugada del miércoles de una turista inglesa que se encontraba bajo los efectos del alcohol en Palmanova.
La víctima había pasado la noche de copas con otros compatriotas y ya avanzada la madrugada se sintió mal, por lo que decidió marcharse a su hotel para dormir. Paró un taxi y le indicó la dirección a la que quería dirigirse. Sin embargo, según su relato, el chófer se la llevó a un lugar apartado y allí la obligó a realizarle una felación. Luego el violador se marchó y la joven pidió ayuda, en estado de gran nerviosismo. Los agentes de la Benemérita que le tomaron declaración constataron que presentaba algunas lagunas en su declaración, debido a la ingesta importante de bebidas alcohólicas. Aún así, parece ser que su relato fue coherente y que no se inventó la violación.
Los investigadores de la Guardia Civil están realizando gestiones para aclarar qué taxista recogió esa madrugada a la turista y cuentan con la descripción física del agresor facilitada por la víctima, que también aportó algunos detalles del coche. Ayer todavía no se había llevado a cabo ninguna detención.