LL.GARCIA/G.PICO
Los servicios de emergencia seguían en alerta ayer ante el riesgo de desbordamiento de torrentes en Sóller, sa Pobla, Esporles y Alaró aunque, a primera hora de la mañana, la situación se encontraba «bajo control», según informaron desde el centro de coordinación de emergencias 112.
En Sóller se estabilizó el caudal del torrent Major, que el sábado por la tarde provocó incidentes y daños al desbordarse en su tramo final, en el Port de Sóller. Varios huertos quedaron anegados y el agua entró en diversos sótanos y plantas bajas de la zona. También, ocho vehículos que estaban aparcados en el parking de Can Miró, sufrieron graves desperfectos al entrar medio metro de agua en su interior y quedar embarrados. El regidor de Governació del Ajuntament de Sóller, José Luis Casasnovas, indicó ayer por la tarde que la situación había mejorado, «se están evaluando los daños» y apuntó que «hacía muchos años, más de 30, que el torrente no se desbordaba hacia la parte de la carretera», como ocurrió el sábado.
Por otra parte, el torrent de Sant Miquel provocó una pequeña inundación en la carretera de s'Albufera, entre sa Pobla y el Port d'Alcúdia. En Alaró el torrent de Na Marranxa también causó problemas y el agua afectó a la estructura de una casa de la calle Coxetí. Parte de una terraza se vino abajo, aunque no hubo que lamentar daños personales. La Policía Local acudió al lugar y realizó un informe.