La tasa de criminalidad se mantuvo prácticamente inalterada durante el año pasado, con un crecimiento del 0,2% respecto a 2005, según los datos presentados por el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, al Congreso de los Diputados. La cifra es el resultado de combinar el ligero descenso del 0,2% en el número de delitos y un pequeño ascenso de las faltas del 0,5%. De forma general, ascendieron los hurtos y la violencia doméstica y bajaron los robos en vivienda o con violencia, asi como los asesinatos. El titular de Interior se declaró «moderadamente satisfecho», pese a que, para la diputada del PP, Alicia Sánchez Camacho, las cifras son «el peor dato en materia de seguridad» en los últimos diez años. La tasa de criminalidad de 2006 quedó en 47,7 infracciones penales por cada mil habitantes, lo que supone un incremento del 0,2%, lo que sitúa a España entre los países con menor tasa de criminalidad de la UE. La media de la Unión, todavía de los Quince, es de un 69, siendo Suecia el país con mayor tasa de delitos por cada mil habitantes.
En el apartado de delitos, la mayoría descienden ligeramente, como los cometidos con fuerza en las cosas, donde se incluyen los asaltos a viviendas, al igual que los robos con violencia y/o intimidación. De los delitos contra el patrimonio, sólo crecieron los hurtos, mientras que en el caso de los cometidos contra las personas, crecieron especialmente los de violencia de género. Por provincias, seis, entre ellas Balears, registraron la mitad de los delitos conocidos por las Fuerzas de Seguridad del Estado el pasado octubre, período en el que contabilizaron en todo el país 73.156. Estas provincias fueron Madrid (15.459), Valencia (6.485), Alicante (5.305), Málaga (4.162), Balears (3.600) y Sevilla (3.550).