JOAN SOCIES/P.M.
Eran alrededor de las ocho y media de la mañana de ayer cuando dos hombres enmascarados entraron en la sucursal de la Banca March en Cala Bona (Son Servera).
Los dos individuos hablaban en inglés e iban armados, uno con una pistola y el otro con una escopeta de cañones recortados. En el interior de la sucursal había tres empleados, dos hombres y una mujer, que fueron amenazados con las armas. Los atracadores se hicieron con un botín que oscila entre los 55.000 y los 60.000 euros. Acto seguido ataron a dos de los empleados, que encerraron en el cuarto de aseo, al tercero lo dejaron fuera y ellos se dieron a la fuga.
De inmediato se dio la voz de alarma y acudieron al lugar policías locales de Son Servera y después patrullas de la Guardia Civil, así como miembros de la Policía Judicial de Manacor. Según testigos presenciales los atracadores se dieron a la fuga en un turismo del que se pudieron recoger algunos datos. Entonces se pasó aviso a todas las unidades de servicio en la comarca, tanto policías locales, Guardia Civil y Cuerpo Nacional de Policía en Manacor, para que se estuviera alerta y se tratara de localizar el vehículo. También, con respecto al idioma que utilizaron los atracadores (el inglés), parece ser que no lo hablaban con fluidez.
A media mañana de ayer Ultima Hora contactó con la oficina de relaciones institucionales de la Banca March, para confirmar lo ocurrido. Desde dicha oficina explicaron que tenían conocimiento de lo sucedido y que los hechos se están investigando, sin aportar más datos. En cuanto a la cantidad exacta que se llevaron los atracadores, ayer se estaba pendiente del recuento. Por fortuna, ninguno de los tres empleados sufrió daños físicos.