E.L.V./J.J.
El Cuerpo Nacional de Policía está investigando la muerte de una
mujer de 33 años hallada ayer en su domicilio de la calle Passatge
de Curtixó, en la barriada palmesana de es Viver. El cuerpo fue
hallado con una herida de arma blanca en el pecho y junto al
corazón, por lo que en primera instancia se pensó que podría
tratarse de un crimen pasional.
Con estos datos, la policía arrestó a su marido como principal sospechoso de un hipotético crimen. Sin embargo, tras la llegada del equipo de la Policía Científica y la recopilación de los primeros indicios, la hipótesis del crimen fue perdiendo fuerza y se pensó que la mujer podría haberse suicidado, por lo que el hombre quedó en libertad.
Al domicilio se desplazó también la comisión judicial del juzgado de instrucción número 12, que ayer se encontraba en funciones de guardia. A los pocos minutos de su llegada y de recopilar los primeros indicios, el juez Àlvaro de la Torre autorizó el levantamiento del cadáver y regresó al edificio de Vía Alemania. La mujer estaba en medio de un gran charco de sangre en una de las habitaciones de la vivienda, y su cuerpo fue retirado por pompas fúnebres para realizarle una autopsia, que aclarará definitivamente si las heridas que presentaba se las pudo producir ella misma con un cuchillo.
El hallazgo tuvo lugar en unas viviendas humildes y de reciente construcción, ubicadas muy cerca del lugar donde hace varios meses un hombre estranguló a su mujer con un cinturón.