Todo el pueblo de Petra se levantó ayer comentando el paso del camión que transportaba una excavadora por la calle Ciutat del casco urbano -el pasado jueves por la tarde-, provocando daños en diversas fachadas y señales de tráfico. El camión quedó encajado y se produjo un revuelo vecinal, por lo que se desplazaron hasta la calle Ciutat efectivos de la Guardia Civil, responsables de le empresa a la que pertenece el camión y el alcalde de Petra, Joan Font, entre otros. Al final se acordó que los vecinos dejaban continuar al camión si la empresa se hacía cargo de los desperfectos. El camión siguió adelante, pero cuando cruzó el pueblo fue precintado por la Guardia Civil al no tener permiso para circular.
Ayer por la mañana los trabajadores de la empresa propietaria del camión comenzaron a trabajar en la fachada de las casas de sa Cabaneta, mientras que los propietarios de otras dos viviendas dañadas no quisieron que le empresa se hiciera cargo del arreglo.
Los vecinos comentaron que la excavadora llegó a Petra para trabajar en las obras de la línea ferroviaria. Después fue utilizada en la cantera de Son Corb, propiedad de la misma empresa. Ahora querían transportar la máquina a otro lugar y la única salida era por el núcleo de Petra. Antes de llegar al casco urbano, el camión que transportaba la grúa ya había causado desperfectos en caminos y paredes. En la calle Ciutat quedó encajado.