A media tarde de ayer el núcleo de Petra se vio envuelto en un revuelo cuando un camión que transportaba una excavadora quedó atrapado entre las paredes de dos casas del carrer Ciutat.
Según comentaron varios vecinos, el camión provenía de la finca de Son Corb y ya había causado graves daños en algunos caminos. A media tarde tenía que cruzar el casco urbano de Petra por la calle de Ciutat y proseguir su camino en dirección Inca.
Pero en el interior del pueblo, en un paso donde las casas antiguas están más cerca y la calle se estrecha, los extremos de la máquina colisionaron con las paredes, ventanas y señales de tráfico. El camión se tuvo que parar y en poco tiempo un gran número de vecinos se congregaron en el lugar.
Al final, después de muchas discusiones y ya con la presencia de la Guardia Civil, los propietarios de la máquina y el alcalde de Petra, Joan Font, se llegó a un acuerdo. Se decidió que los vecinos dejaban pasar al camión si la empresa a la que pertenece pagaba los daños causados. Después de una hora, y poco a poco, el camión cruzó el casco urbano.