Mientras la mitad de los palmesanos se acostaban tras una larga noche de fiesta y la otra mitad se despertaban para ir al trabajo, un inesperado «fogueró» de última hora provocó un enorme caos circulatorio en la calle Aragó de Palma, cuando un Citroën Saxo ocupado por dos jóvenes se prendió fuego.
El incidente tuvo lugar sobre las 07.30 horas de ayer, cuando los dos ocupantes comenzaron a notar que el sistema de refrigeración fallaba y que el motor se calentaba en exceso. El conductor decidió parar a la altura del número 159 y averiguar la causa del problema. Sin embargo, al levantar el capó se vio sorprendido por una enorme llamarada que apenas le dio tiempo a apartarse.
Las llamaradas, de una gran virulencia, alcanzaban varios metros de altura. Los primeros en acudir al lugar fueron los empleados de una tienda de extintores situada a escasos metros del lugar, que intentaron sin éxito apagar las llamas. Además, hubo algunos momentos de tensión cuando el intenso calor provocó la explosión de los neumáticos. Unos diez minutos más tarde llegaron los bomberos, que comenzaron a arrojar agua sobre el vehículo. Una enorme nube de humo se extendió entonces por la calle Aragó, que a esas horas ya estaba colapsada por una larguísima fila de coches que circulaban en dirección al Pont d'Inca.
Finalmente, el coche fue retirado y el incidente se saldó sin daños personales.