El jubilado de Binissalem que el martes fue hospitalizado por una tremenda y dolorosa erección continúa en el centro, recibiendo tratamiento contra el priapismo que sufre.
Tal y como informamos en la edición de ayer, el hombre -de 71 años- fue atendido en un centro médico de su localidad y horas después una ambulancia lo trasladó hasta Son Llàtzer. No soportaba el dolor que le producía aquella rigidez prolongada del miembro y quedó hospitalizado. Ayer, fuentes médicas explicaron que el varón estaba recibiendo tratamiento, pero declinaron ofrecer más detalles «porque es un asunto un poco delicado». El priapismo consiste en una erección dolorosa y sostenida, y existe un tratamiento concreto para neutralizarlo. Una de las fórmulas es aplicar frío en la zona sobrestimulada, acompañado de ansiolíticos y anestésicos locales. Si el enderezamiento continúa se puede extraer sangre del pene. Los casos de hospitalizados por enormes erecciones son poco frecuentes en Mallorca, según refirieron ayer las fuentes médicas consultadas. El priapismo controlado a tiempo sólo ocasiona dolores y molestias al paciente. Sin embargo, si la rigidez extrema persiste puede desembocar en una necrosis de consecuencias fatales para el miembro. Sobre el origen de la asombrosa erección del jubilado, de momento no ha trascendido si se debió a un problema genital o a la ingesta de pastillas.