Una banda formada por individuos de etnia gitana que se dedicaban a desvalijar obras de Mallorca ha sido desmantelada por la Guardia Civil de Pollença.
De momento se han practicado tres detenciones y hay más personas implicadas, por lo que el número de arrestados se incrementará. El grupo, a bordo de una furgoneta, visitaba de noche Marratxí, el Pont d'Inca, Santa Maria y Consell, entre otras localidades, en busca de obras en fase de construcción. Se trataba por lo general de edificios y urbanizaciones, donde las cuadrillas de obreros habían guardado sin demasiada precaución herramientas valiosas. Tras percatarse de que no había vigilancia, los delincuentes accedían a las obras y la desvalijaban. Arramblaban con martillos, alternadores, alicates, berbiquíes, compresores y otras herramientas, que cargaban en el vehículo y se llevaban luego hasta zonas seguras (casetas de su propiedad, normalmente). El siguiente paso consistía en vender ese material, antes de que fueran descubiertos. Y para ello acudían los domingo al mercado de Consell, donde las ponían a la venta a precio muy inferior al real. En la operación policial, que no ha concluido, los agentes se han intervenido de decenas de herramientas, por un importe muy elevado. Las víctimas de estos robos pueden visitar el material recuperado.