E.LÓPEZ VERDÚ/MICHELS
Josefine A.W., la joven inglesa que el miércoles de madrugada
atropelló mortalmente a una pareja de irlandeses en Santa Ponça y
luego se dio a la fuga, ingresó en prisión ayer por la noche tras
prestar declaración ante la juez de guardia. Ana San José, titular
del juzgado de instrucción número 5 de Palma, decretó un auto de
prisión eludible bajo una fianza de 12.000 euros, por lo que la
joven británica podría salir de la cárcel en los próximos días si
abona esta cantidad.
La joven se mostró muy traumatizada durante su declaración. Josefine explicó que momentos antes del accidente se despistó cuando estaba metiendo un CD, y que sólo se dio cuenta de la presencia de la pareja cuando impactó con ellos. La conductora, que iba deprisa, aseguró que se bajó y que, al ver los dos cuerpos tendidos sobre el asfalto, se bloqueó, sufrió un ataque de nervios y optó por escapar, aunque a primera hora del día siguiente se entregó a la policía.
Josefine pasó la noche del miércoles al jueves en los calabozos de la Policía Local de Calvià, acusada de un delito de omisión del deber del socorro. Por la mañana prestó declaración ante los agentes municipales, que durante todo el día mantuvieron un misterioso hermetismo sobre la versión de la conductora y no quisieron facilitar ningún dato a los medios. Los policías la sometieron a la prueba de alcoholemia, y el resultado fue negativo.
A las cuatro de la tarde la acusada fue trasladada hasta los juzgados de vía Alemania. El médico forense la examinó para determinar cuál era su estado y luego comenzó su declaración ante la jueza, en presencia de su abogado Esteve Siquier y el letrado Miquel Àngel Cardell, en representación de los tres hijos de la pareja fallecida, que tienen edades comprendidas entre los 20 y los 27 años.