Alrededor de la una de la pasada madrugada, los turistas que se encontraban alojados en el hotel Villa Real, en es Camp de Mar, escucharon un gran estruendo y muchos de ellos salieron a la calle a ver lo que había pasado. Un coche con el morro medio chafado y una farola a punto de caer fue la escena que se econtraron. Por fortuna, los dos ocupantes del vehículo no sufrieron lesiones.
En el lugar del accidente se personaron poco después efectivos de la Policía Local y de la Guardia Civil de Andratx, que se encargaron de regular la circulación y elaborar el pertinente informe. El conductor no supo explicar qué le había pasado para perder el control y empotrarse contra un pequeño muro y una farola, en un tramo curvo, en la carretera que enlaza es Camp de Mar con el Port d'Andratx, aunque dentro del primer núcleo.
El coche en cuestión es un Peugeot 307 de color negro y se solicitó la presencia de una grúa para que fuese retirado de la vía pública, ya que había peligro de que otros coches chocasen contra él.
El conductor y su acompañante, ambos jóvenes, pudieron salir por su propio pie del vehículo y no precisaron asistencia sanitaria.