Durante el año 2004, el Instituto de Reinserción Social (IRES) atendió a 268 personas implicadas en procesos penales en los juzgados de Palma y Manacor. El IRES nació como ONG hace casi 30 años y en 1987 creó un Servicio de Atención Social para prestar atención directa, tanto de apoyo directo como de seguimiento, en los juzgados. Desde hace pocos años, el IRES recibe subvenciones por parte del Govern, Consell de Mallorca y Ajuntament de Palma. Durante la jornada de ayer, esta ONG presentó su memoria de 2004. En ella destaca que, del total de 268 atendidos, el 80 por ciento fueron hombres. El resumen anual también indica que el 64 por ciento de los usuarios eran drogodependientes, mientras que el 24 por ciento padecía graves problemas de salud y el 56 por ciento eran reincidentes en delitos penales.
El director del Institut de Serveis Socials, Antoni Serra, destacó que el IRES es un instrumento que cuenta con el total apoyo y colaboración de los jueces, y que supone «un elemento fundamental de rehabilitación». Para el teniente fiscal del TSJB, Ladislao Roig, la «pervivencia y resistencia del trabajo de los sociólogos es fundamental para seguir creyendo que es posible la aplicación de otro derecho penal que no sea la pura represión».