Modou Kebe, el inmigrante senegalés que denunció una agresión policial frente al edificio de la Jefatura de Palma, ha sido finalmente condenado por agredir a un agente policial. Kebe deberá pagar dos multas de 60 euros por una falta contra el orden público y otra por una falta de lesiones. Asimismo, deberá pagar una indemnización de 500 euros al agente por las lesiones que le produjo, consistentes en un corte en una ceja y contusiones en las costillas, y otra cantidad aún no determinada por unas gafas de sol y un teléfono móvil del policía y que resultaron rotas durante el altercado.
De este modo, los acontecimientos han dado un giro radical desde que el pasado 2 de junio de 2004 Kebe y una vecina de Palma denunciaran los hechos. El caso trascendió a los medios de comunicación y Kebe recibió el apoyo de numerosos colectivos sociales de Palma, que criticaron duramente la actuación policial en una rueda de prensa.
El caso quedó en manos del juzgado de Instrucción número 1 de Palma, y el pasado día 4 de mayo se celebró el juicio, tal y como adelantó Ultima Hora. Durante el mismo, la fiscal acusó a Kebe y eximió a los tres agentes que participaron en su detención. El fallo del juez condena a Kebe y absuelve a los agentes.
Según ha podido saber este diario a través de fuentes judiciales, el fallo considera probado que Kebe se acercó a las primeras posiciones de la fila, formada por numerosos inmigrantes, y comenzó a estirar de ellos para colocar a otras personas, en virtud de una lista que él mismo había confeccionado. Los agentes, que se ceñían al criterio del orden de llegada de ese mismo día, acompañaron a Modou hasta los últimos puestos de la cola, momento en que éste agarró del cuello a uno de los agentes y le dio un puñetazo en la frente. Los dos forcejearon y cayeron al suelo, hasta que otros dos policías acudieron en su auxilio y esposaron a Kebe. En ese momento llegó una mujer que siguió a los policías hasta la puerta del garaje de Jefatura.