La policía ha desarticulado una red de expoliadores, vendedores de piezas arqueológicas, falsificadores de obras de arte y falsos marchantes en una macrooperación en la que se han intervenido más de diez mil bienes culturales originales y falsificados y se han practicado dieciséis detenciones.
Las detenciones, según informa la Dirección General de la Policía, se han producido en Madrid, Cataluña, Andalucía, Comunidad Valenciana y País Vasco, comunidades en las que además se han realizado veinte registros.
La operación, denominada «Lirio», se ha dirigido contra las agresiones que afectan al Patrimonio y, sobre todo, contra la creciente introducción clandestina en el mercado de todo tipo de bienes culturales falsificados, que han dado lugar a la comisión de numerosos fraudes.
En concreto, los agentes de la Brigada de Investigación de Patrimonio Histórico, en colaboración con los de las Jefaturas Superiores de Policía de Cataluña, Sevilla, Valencia, Bilbao y las comisarías provinciales de Málaga, Almería, Alicante, Guadalajara y la comisaría local de Igualada (Barcelona), se han incautado de más de 10.358 objetos y bienes culturales de gran valor arqueológico y cultural, tanto originales como falsificados.