Ya están en Palma, pero aún tienen el susto en el cuerpo. Cuatro tunos mallorquines fueron detenidos el pasado fin de semana en un pueblo de Suecia acusados de una supuesta agresión sexual en un hotel y ayer, ya en libertad, declararon a Ultima Hora que habían pasado un calvario «porque la denuncia contra nosotros era falsa».
Los jóvenes acudieron a la localidad de Falkenberg porque habían sido contratados para participar en una fiesta temática sobre España, que se debía realizar en un hotel. Los cuatro amigos actuaron sin ningún problema, pero en una de las jornadas su situación cambió de forma radical. Los gritos de una mujer alertaron al resto de turistas del hotel, y cuando la interrogaron sobre lo que había ocurrido aseguró que los cuatro tunos mallorquines habían intentado abusar de ella en una habitación.
Desde la dirección del hotel se avisó a la policía, y los españoles fueron detenidos, mientras se aclaraba qué había pasado en el hotel. «La denuncia de aquella chica fue falsa, no hicimos nada de que según ella pasó. Tampoco es cierto lo que se ha publicado en los medios de comunicación suecos», contó uno de los componentes de la tuna, todavía muy afectado por la odisea. Lo cierto es que tras cuatro días en los calabozos los mallorquines fueron puestos en libertad, lo que evidencia que los cargos contra ellos no eran demasiado consistentes. Los tunos, con todo, consideran que fueron tratados «mal» y ya han contactado con un abogado para estudiar emprender acciones legales por denuncia falsa.
El caso, en aquella localidad sueca, ha sido ampliamente comentado y los periódicos locales -al menos tres de ellos- le han dedicado páginas al tema. Incluso publicaron la foto de los mallorquines en una de las actuaciones en el hotel, antes del incidente.