La banda desarticulada el jueves y que abastecía de droga a numerosos 'camellos' de la zona Norte de la isla adquiría los alijos en Alicante y los introducía en Mallorca vía marítima.
Desde la Oficina Periférica de Comunicación (OPC) de la Comandancia de Palma se ofrecieron ayer detalles sobre la operación antidroga que adelantó ayer Ultima Hora. En el mes de febrero se detectó que una banda formada por ciudadanos árabes se dedicaba al narcotráfico a gran escala en Inca, Llubí, Can Picafort y Muro, entre otras localidades. El principal sospechoso era Said A., de 34 años, que residía en Llubí. Los agentes lo sometieron a una discreta vigilancia y constataron que se reunía con un tal Mohamed E., de 25 y conocido por su relación con el mundo de la droga.
Asimismo, se comprobó que Said estaba unido sentimentalmente a una compatriota, Nadia M., de 29, que efectuaba frecuentes viajes a Alicante. Rachid A., de 28, también se relacionaba con esta banda. Hace algunos días Said intensificó sus contactos con otros narcos y se llegó a la conclusión de que estaba a punto de llegar un gran alijo. El día 13 Said y Nadia se reunieron en Can Picafort y se dirigieron en coche a Palma, en concreto al muelle. Allí esperaban a los pasajeros de un buque de Alicante: Francisco Javier V.C., de 44, y Violeta S., de 39.
Los dos españoles traían 300 gramos de cocaína. Todos los implicados fueron detenidos in situ y la operación continuó en Palmanova, donde 'cayó' Mohamed E. y los senegaleses Bara S., de 22, Serigne N., de 34, y Antonio M.S., de 27. En total se aprehendieron 2.000 pastillas de éxtasis, 320 gramos de cocaína, 1.100 gramos de marihuana, 50 gramos de hachís y tres vehículos. Los domicilios de los sospechosos en Inca, Llubí, Can Picafort y Muro fueron registrados.